De acuerdo al historiador mexicano, Ángel María Garibay, quien fue un sacerdote que también fue un experto en varios idiomas indígenas, la palabra “Chilaquil” viene del náhuatl, de la palabra chilaquilli, conformada por chiol(-li) “chile”, el ingrediente principal, y aquilli sustantivo derivado del verbo aquia “estar metido en, entrar en algo”, por lo que aquilli significa “[algo] metido en”.
Por lo tanto la palabra chilaquilli castellanizada como chilaquil significa “Metidos en chile” en referencia a los totopos, los que son unos trozos de tortillas fritos o tostados.
Los chilaquiles son un de los platillos con más tradición en el desayuno mexicano, de acuerdo a los expertos. Por lo general, se acompañan con crema, queso y rodajas de cebolla.
Su preparación se compone de tortillas de maíz cortadas, fritas y cocinadas en salsa. Se sirven al gusto, ya sea con huevos estrellados, pollo deshebrado, frijoles y con bistec.
De acuerdo a los expertos, en los estados centrales de México los prefieren en salsa verde, cocida, condimentada con ajo, cebolla, epazote y cilantro.
En estados como Guanajuato los elaboran con salsa muy picosa, con chile guajillo, tomate, cebolla y ajo. A menudo se les agrega queso chihuahua.
En Michoacán, los chilaquiles suelen ser que la salsa incluya epazote.
Fuente: Internet
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